Jose Luis Puche, entrevista y aproximación a su obra: “Elixir per se”
Instalación “Elixir per se”, de Jose Luis Puche. Fotografía, Maribel U. (licenciaCC).
Obra de fondo de imagen, también de Jose Luis Puche: “11.02 y bajando”
Este mes pasado he podido conocer mejor la obra de Jose Luis Puche, artista visual malagueño afincado en Almería, cuya obra llevaba gustándome hacía tiempo, mucho antes de conocerlo en persona. Un artista multidisciplinar y en continuo crecimiento, interesado en todas las manifestaciones del Arte del pasado, del presente y del futuro (al que contribuirá sin duda), y sensible, por cierto, a toda manifestación cultural en general (parece que necesariamente deben ir unidas ambas cuestiones, artista o Arte más interés por la Cultura, pero no es así siempre).
La obra de Jose Luis , a la que me acerco en este blog, es “Elixir per se”, una instalación presentada a finales de Septiembre en AMGallery, (Roquetas de Mar, Almería), y es una muestra de sus inquietudes, sus ideas artísticas y su buen hacer plástico, estético y conceptual, donde lo etéreo se une a lo concreto en una suerte de ligeras piezas colgadas del techo que nos sorprende por su bella fragilidad y riqueza cromática.
Compuesta por 182 piezas escultóricas que reproducen bolsitas de té, cada una manufacturada con gelatina epoxídica y pigmentos orgánicos entintados y 316 metros de hilos que varían cromáticamente y suspenden dichas esculturas volátiles, “Elixir per se” se convierte en una composición llena de sutileza que gravita en el espacio como una “ tililante lluvia de pétalos de té” (en acertadas palabras de María del Mar Domínguez, directora de AM Gallery) que nos atrae para tocarla (aunque no debemos, claro), mirarla sin empacho y dejar volar nuestra imaginación en completa libertad.
Pero, tras esta composición visual se esconde también una interesante historia, la que impulsó el proyecto (realizado a lo largo de casi cuatro años), y que Jose Luis me refiere así: “Paseando por Málaga vi cómo un grupo de obreros árabes trabajaban en el interior de un local que al final se convertiría en un lugar de venta de telefonía móvil. Todos sentados conversaban y tomaban un té. Alguien da un grito y todos al mismo tiempo sacan su bolsa de té de donde estaban bebiendo, dan unos giros sobre su eje y lo lanzan al techo. Se levantan y se van. Yo quise entrar para ver dónde habían ido a parar todas aquellas bolsas de té; entré y vi que todo el techo estaba plagado de bolsas de té. Posiblemente no lo supieran, pero aquello era toda una obra de arte, una nueva cueva con formas de estalactitas. Aquel modo de colgar el té no era sino reflejo de momentos compartidos, fruto de la espontaneidad, de la fuerza orgánica dotada de una gran belleza estética”.
…A partir de ese momento, Jose Luis comenzó a pergeñar su futura obra, fijándose en los diversos tipos de bolsitas de té y guardando toda la que caía en sus manos (implicando incluso a sus amistades, que se las iban también guardando…). Todo un proceso en cadena para comenzar a realizar los moldes, realistas y llenos de plasticidad: “siempre he sido un enamorado del pliegue, ya que es sin duda la ductibilidad de la forma y el volumen, encuentro en esas bolsas un nuevo modo de estudio de pliegues”.
Y sigue comentándome su labor y proceso creativo: “Opté por fórmulas clásicas, como el círculo y la gama cromática, un modo de aportar un orden y razón que estuviese al servicio de una contemplación puramente hedonista, similar a la que tuve al observar aquel momento. Mi misión como artista fue trasladar ese momento orgánico de la observación y mejorarlo en la manera de lo posible, en este caso con el orden y el color”.
Sobre el interesantísimo (al menos para mí -al acecho siempre de explicaciones de este tipo-) proceso técnico que siguió, me comenta también: “(…) comencé a solidificar las distintas bolsas de te que me iban llegando, algunas más grandes, otras pequeñas y fui creando los moldes de silicona de los que irían saliendo. Las primeras reproducciones fueron un desastre, utilizaba el epoxi pero no salía, utilicé poliéster pero tampoco, incluso opté por la cera y el yeso, pero no hubo manera, fueron meses de prueba y prueba, y un día me di por vencido y rechacé la idea de realizarlo, muy a mi pesar claro. Pero un día volví a encontrarme con los moldes y pensé que quizás el problema era la presión, y di con la clave, con lo cual las esculturas empezaron a salir adecuadamente. Cuando empecé era invierno y el epoxi tardaba en solidificarse una semana, por lo que el proceso fue muy lento, varios meses para muy poca tirada, pero a medida que fue llegando el buen tiempo en dos días llegaba la solidificación”.
Vista y disfrutada la obra, diseccionado su proceso creativo desde la idea a la manufactura, y reflexionada la apariencia estética junto con el contenido de la instalación, puedo decir que Jose Luis Puche nos ofrece aquí el regalo de un trabajo artístico excelente, no sólo bello y bien realizado, sino que, además, homenajea, en cierto modo, el trabajo cotidiano de los trabajadores de la construcción (del Magreb o no, musulmanes o no) donde también puede haber un momento de belleza, un momento íntimo para reconfortarse y poder seguir la labor diaria.
Como para una inmensa mayoría de personas anónimas, el día a día puede ser duro, pero se suaviza con un “algo más” fuera de diversos materialismos y más cercano a lo espiritual, a las sensaciones y a los sentimientos, un “plus” que necesitamos como respirar, y que significa muchas veces el Arte, un “algo más” como el que nos muestra “Elixir per se”, de Jose Luis Puche.
“Elixir per se”, de Jose Luis Puche. Fotografía, Maribel U. (licenciaCC).
Entrevista a Jose Luis Puche:
-¿Hasta cuándo podemos ver tu instalación actual en AMGallery y tu obra obra expuesta:”11:02 y bajando”?
Para eso no hay fechas concretas ya que AM sigue unas políticas de exposición distintas al resto de galerías al tratarse de una exposición colectiva, pero puede ser aproximadamente dos meses.
-¿Tienes alguna obra entre manos?.
Si, tengo entre manos otra obra donde prima el dibujo, aunque también estoy intentando proseguir por el campo de la gelatina epoxídica, su reproducción, la cual ofrece unos resultados de gran calidad matérica, aunque aún no puedo decir ni qué es ni si será un proyecto factible, está aún en proceso mental de construcción.
-¿Tienes a la vista alguna exposición próximamente?
A la vista tengo una exposición individual en AM Gallery pero aún está por confirmar la fecha.
-¿Con qué materiales, soportes, etc., te sientes mejor trabajando?
Sin duda con el grafito, creo que por vicio desde pequeño, de ahí la habilidad adquirida. Estoy muy concienciado con teorías artísticas del quattrocento italiano como las de Filarete, Alberti o el propio Leonardo, donde ponen la base y el pilar de toda creación artística en el dibujo. Es una herramienta básica a la par que versátil, mientras otros muchos han visto en el dibujo una herramienta de tránsito, preparatoria para la pintura o la ideas yo la he observado en la historia del arte como obras de arte en sí mismas, ya sean simples esbozos u obra per sé. Quizás por ello mis dibujos han llegado a alcanzar la dimensión de 240 cm, porque es posible que con ello reivindique un papel protagonista de una técnica que por antigua que sea aún es actual.
Por otra parte también destacaría mi relación con el epoxi, que en mi aventura de investigar nuevas posibilidades di con un material fino aunque complejo de utilizar y domar, que me ha servido tanto para pintar como para crear obras esculturas como “elixir per se”. Y que evidentemente seguiré trabajando.
-¿Tienes un ritual o proceso artístico concreto?
Bueno, normalmente dejo que las ideas residan en la mente un tiempo, después las desarrollo levemente y las someto a debate para ver si merece la pena llevarlas a realizarlas, ese es mi proceso. Una vez Guillermo Pérez Villalta me comentó que no todas nuestras ideas son dignas de ser artísticas, y la clave está en seleccionar aquellas que si lo son. Creo que lleva razón.
-¿Cómo te “posicionas” ante tus obras? ¿Quieres transmitir, comunicar, simplemente expresarte, todo? ¿Dejas libertad total al que la vea o prefieres que conozcan su “significado”? (pregunta múltiple y compleja, soy consciente).
No creo en la dictadura de la razón, es decir, creo en la obra que admite acepciones, abierta a distintas posibilidades, es más, ni siquiera yo quiero dominar su razón de cabo a rabo.
-¿Cuál crees que es el “camino” actual del arte de hoy?
El arte de hoy día no tiene parangón en la historia del arte. Nunca una época artística ha vivido tanta transformación en el plano matérico ni tan siquiera conceptual como ésta época nuestra. A medida que avanza la sociedad y las fuentes de conocimiento éstas tienen cabida en la rama artística. Por otro lado me gustaría mencionar el papel de la profesionalidad del arte, no sólo de los agentes culturales, que se han multiplicado y son factores imprescindibles para la creación y culminación de un proyecto artístico, sino también la incursión de las ciencias tecnológicas de las que muchos artistas se sirven para llevar a cabo sus trabajos. Todo esto hace que el arte hoy día se observe bajo la óptica de la complejidad, quizás nos falte perspectiva, pero yo intento ser más simplista a la hora no sólo de trabajar sino también de observar la obra de otros muchos artistas con la que disfrutas de todas todas. Aquellos quienes tienen una visión catastrofista del arte, que si se está acabando o está muerto deberían darle la vuelta al pensamiento y observar todo lo que está pasando como una da las etapas más prolíficas de toda nuestra historia, comparable a lo emergente en la época clásica griega. Los resultados a los que llegan muchos artistas (fotografía/video/ nuevas soluciones arquitectónicas y escultóricas) no se han producido jamás y quizás me pase comparándonos a los griegos pero si no lo somos ya puede que estemos en el camino. Hablo de la novedad, de las nuevas soluciones para el arte y que esto está pasando ahora y no hace un siglo. Aún así no todo es maravilloso, la Historia del Arte nos ha dejado cosas maravillosas, mediocres y malas, en esto no hemos cambiado, evidentemente.
-¿Podrías decirme un sueño personal, como artista?
Mi sueño es sin duda una obra que tarde o temprano tendré que realizar, por la historia de mi familia, de mi ciudad, a consecuencia de ella misma yo existo, y no puedo ser inexorable a todo ello. Ese se podría decir que es mi sueño, llegar algún día a concretarla, trabajarla y presentarla. Es posible que parezca un sueño fácil de cumplir pero no lo es.
“Elixir per se”, de Jose Luis Puche. Fotografía, Maribel U. (licenciaCC).
Enlaces de interés sobre Jose Luis Puche y su obra:
Curriculum Vitae y artístico: http://biografiajoseluispuche.blogspot.com/
http://www.am-gallery.es/index.php?opcion=9&idartista=13
En otros medios: http://www.tertuliaandaluza.com/cultura/artistas-emergentes/jose-luis-puche/
“Elixir per se” y parte de “11.02 y bajando”, obras y fotografía de Jose Luis Puche